viernes, 15 de marzo de 2013

el ciclo de la vida II

los tres gatos jóvenes siguen creciendo. y siguen los tres. la gata madre ya volvió a parir. me vio venir a lo lejos. creo que me conoce por la forma de caminar. y viene diciendo miaumiaumiaumiau y en seguida he visto que en lugar de panza redonda tenía tripita colgante de recién parida -ay, gatuna, esta vez es demasiado pronto, ¿no ves que aún va a helar? no aciertas, gata- entonces sus hijos la oyen y vienen también y me rodean y me hacen chantaje psicológico mientras entro al portal y mientras subo las escaleras están ahí mirándome, y apoyan las patitas contra el cristal de la puerta. así que agarro un par de latas de comida y se las bajo. 

por primera vez en estos años, durante un momento, mientras comía, y sólo un segundo y con la yema de un dedo, he tocado la frente de la gata madre. y no se ha ido. 

al olorcillo de la comida ha aparecido el gato cojo. definitivamente su pata se ha soldado mal. la tiene torcida. se le va a quedar así. pero parece que cada día se adapta mejor a su nueva condición. y va sobreviviendo. 

como todos. sí.