domingo, 26 de mayo de 2013

no hubiera apostado por ello pero

resultó que el cuerpo
servía para algo más

algo más que
despreciarlo
menospreciarlo
subestimarlo
olvidarlo
mirarlo con asco
o con recelo
o con indiferencia

algo más que para vestir
un puto uniforme

para algo más que
follar
follarlo
dejar que lo follen
algo más que
emborracharlo
drogarlo
medicarlo
maltratarlo
simplemente ignorarlo

para algo más que
tatuarlo
o escribir con cutter
iniciales de nombres
de -supongo que ya- hombres
que amé de niña

para algo más que estorbarme.