viernes, 19 de octubre de 2012

Contra los recortes (XIII) Dante ya lo decía


El Maestro Juan Varela-Portas, profesor en la Facultad de Filología de la Universidad Complutense de Madrid, impartió una clase en plena calle como protesta contra los recortes que está sufriendo la educación. La Complutense en concreto está en una situación desesperada. La clase trató sobre Dante. Horacio, que pudo asistir, me ha pasado esta foto y los textos sobre los que hablaron. Una crítica a la avaricia escrita en los siglos XIII-XIV.

Dolor da al corazón la osadía
de voluntad a la verdad amiga;
así que si yo hablo,
mujeres, contra casi todo el mundo,
no nos debéis sorprender,
mas vuestro vil deseo reconocer;
ya que os concede Amor la hermosura
sólo para virtud:
tal la formó con su antiguo decreto
al cual faltáis vosotras
[...]
Son los que sirven como aquel que sigue
rápido a su señor, sin saber dónde
por mal camino vaya
como el avaro que busca riqueza,
que a todos señorea.
Corre el avaro, y huye de la paz
¡oh mente ciega que no puede ver
su alocado querer
que el número, que nunca es suficiente
delirio es de infinito!
Y llega la que a todos nos iguala:
dime ¿qué has hecho tú,
ciego avaro y deshecho?
¿Qué puedes contestarme sino 'Nada'?
¡Maldita sea tu cuna
que tantos sueños ha mecido en vano!
¡Y el pan maldigo que en ti se perdió,
en vez de darlo al perro!
Ya que de día y de noche
acumulas y estrechas en las manos
lo que de ti cada vez más se aleja.
Como con desmesura se acumula,
así con desmesura se conserva;
lo que muchos reduce
en servidumbre, y si alguien se salva,
no es sin gran esfuerzo.
¿Qué haces, Muerte?¿Y tú, buena fortuna?
¿Porqué no devolvéis lo que se guarda?
¿Y a quién, si es que lo hacéis?
No sé, ya que parece ser destino
que desde arriba llueva:
culpa de la razón, que no castiga.
Si dijera 'No puedo',
¡ay, que débil se muestra
señor que por el siervo es dominado!
Es doble la vergüenza,
si se mira a las bestias que denuncio:
a los demás hostiles y a vosotros,
ya que veis ir desnudos
por collados, pantanos,
a hombres que los vicios han recluido,
y con vil barro vosotros os vestís.
(Doglia mi reca, vv. 1-10, 64-105)

Que las riquezas, aunque así se opine,
no pueden dar ni quitar gentileza,
porque son viles por naturaleza
ya que pintar figura
sin convertirse en ella no se puede,
ni a una erguida torre
socava río que a lo lejos corre.
Se prueba que son viles e imperfectas
porque aunque se acumulen
no dan quietud, provocan nuevas ansias,
así que un temple fuerte y verdadero
por quedarse sin ellas no se inmuta.
(Le dolci rime 49-60)
Traducción de Raffaele Pinto


-Resistimos-