porque echo intensamente de menos el blog de Angélica Liddell, 'Mi Puta Perrera'. muchos días lo busco con la esperanza de que lo haya vuelto a abrir. no es imposible, ya ha ocurrido otras veces; pero a medida que pasa el tiempo parece menos probable. hay muchos perros que estamos mucho más abandonados desde que cerró la perrera.
yo siempre he sido más de gatos. mi casa siempre fue una gatera, y la nostalgia del blog de Ángélica me tiraba hacia este nombre, 'Mi puta gatera', que milagrosamente no estaba registrado, y lo he registrado yo. de momento no lo voy a usar. es por si acaso. por egoísmo puro. por nostalgia. por admiración. por empatía. por poseerlo para siempre, poseer ese nombre. pero usarlo parecería dar a entender que este blog es una copia de ese blog, y no. Angélica es Angélica y es mucha Angélica. A su lado soy un hueso de pollo.