miércoles, 4 de mayo de 2011

superVivencia del esPíritu en trabaJos inestaBles- LXXXI

¿qué pasaría si la azafata hiciese una pregunta a un ponente? está prohibido pero lo pienso a ratos porque total, yo tengo el micrófono en la mano todo el tiempo, y al final la mierda de congreso me interesa, porque es sobre innovación y expansión tecnológica en américa latina, especialmente la innovación y la expansión de la importante multinacional de comunicaciones que organiza este evento, y en realidad no tendría porqué ocultar su nombre, porque al presuponer a las azafatas como seres esencialmente simples, no firmamos ningún tipo de cláusula de confidencialidad en nuestro contrato y yo puedo decir lo que me dé la gana. podrían despedirme si estuviera trabajando allí de manera estable, pero como me contratan por días, pues simplemente la agencia de azafatas no me volvería a llamar y ya está. pero tal vez si algún día encuentro un trabajo de verdad, lo haga durante mi último congreso como azafata. por darme el gusto, y salir por la puerta grande. 

porque si empiezan a hablar de desarrollo socioeconómico, y de expansión y de innovación y de recursos naturales y de capital humano y de reservas de litio en guatemala y de la ventana de oportunidad que está abierta ahora mismo y durante la próxima década en toda américa latina como destino ideal de expansión, y de investigación y desarrollo y de responsabilidad social corporativa y de algo que me ha dejado a cuadros llamado 'social business' a mí me surgen preguntas pero como soy la azafata no las puedo hacer.

así que en un momento dado empiezo a hablar por lo bajini con las compañeras. 

-¿social business? venga ya, menudo social business. lo dice la empresa que despide a miles de empleados días antes de anunciar que los directivos han cobrado un pastizal en bonus...

-pero sí tiene sentido lo del 'social business' porque cualquier riqueza genera riqueza en más ámbitos que el económico. donde llega una empresa como ésta hay más desarrollo en más niveles. y tienen un montón de obras sociales- me responde una de mis compañeras, la que estudia económicas y derecho a la vez.

-mira, lo de la responsabilidad social corporativa lo usan las empresas por tres razones: una, blanquear dinero; dos, porque desgrava y tres, porque así se dan buena publicidad y lavan su imagen. es pura farsa. 

-no, pero lo que hagas en el extranjero no desgrava...

-...sí, sí que desgrava...-dice una tercera compi, la que estudia derecho y administración y dirección de empresas

"...hay que invertir en talento, hay que invertir en la juventud y en su valía, porque están muy bien preparados y blablablalbla..." dice el ponente

-Tenéis que ir una de vosotras a estar en el escenario. Os vais relevando- nos interrumpe la jefa.

y una va y las demás dejamos nuestra conversación y me pongo a pensar en cómo sería un congreso de azafatas de congresos. podríamos acreditarnos nosotras solitas, sabríamos dónde está el puto baño, nosotras nos cambiaríamos los cartelitos de las ponencias y todas sabríamos encontrar en la mesa de documentación el orden del día y la memoria del congreso.
yo, como organizadora, contrararía unas cuantas azafatas a las que pondría un uniforme precioso; haría que esas dos palabras fueran compatibles. comerían del catering lo que les diera la gana, y tendrían sillas para sentarse porque todas las asistentes al congreso sabrían que es absurdo permanecer de pie durante horas como si esto fuera una especie de entrenamiento militar de firmes y con tacones. y podrían hacer preguntas y opinar.