es posible dormir once horas y levantarse con ojeras.
se puede dormir mucho pero mal.
no he parado de moverme, lo he notado toda la noche.
me he despertado y estaba en diagonal sobre la cama.
no en un lado ni en el otro ni en el centro:
en diagonal.
a la gata la habré echado de una patada en algún momento, porque no estaba.
soy la hipotenusa de mi cama; mi cuerpo encontró -después de moverse tanto y tan inquieto; las mates nunca se me dieron demasiado bien- una solución matemática para ese lugar que a veces se hace tan tan grande.