iba directa desde el trabajo y me sobraba tiempo, así que me pasé por una librería cercana. sólo a mirar, claro. lo que pasa es que al final miro con las manos. resultado: tres libros.
de ahí fui a Los Diablos Azules, en lo que parece que va a convertirse en una cita semanal con los relatos cortos. es la segunda vez que voy. para quien le pique: cada miércoles llevan a un escritor invitado que lee textos, presenta su libro o lo que quiera. luego propone una frase, y el público tiene un rato para escribir una historia que contenga esa frase. después la gente sale a leer sus relatos, y el escritor invitado decide quién es el ganador, que se lleva una gratificante botella de vino.
"La justicia es una mierda. Pero hay que ver el lado bueno:
todo el mundo sabe que si pisas una justicia, te toca la lotería."
dicen que la literatura no da de comer...pero a veces da de beber: me llevé la botella de vino, oh sí, nenes. una de las dos: ayer, de manera excepcional, hubo premio doble porque era el segundo aniversario de los miércoles literarios. así que comparto el honor con mucho gusto.
de ahí fuimos al Bukowski, otro bar literario en el que hacen jam session de poesía.
(que estuvo de lo más interesante aunque lo estropeara yo, fatal como leo, porque aún me peleo y me peleo con el concepto de poesía recitada y estoy inmersa en una encarnizada lucha interior sobre el tema)
joder, pues eso, que no estuvo nada mal la noche.
valoración final del 12/12/12: La mujer-precipicio, de Princesa Inca, que estaba en mi lista de deseados desde hace mucho. Antología de poetas contemporáneas, por la imperiosa necesidad de saber qué se cuece y Antilogía Contrapoesía por la misma razón y porque la edición es preciosa.
también caí con el libro de la presentación, Cerdos y Gallinas de Carlos Quílez. tiene una pinta estupenda, la presentación -a cargo de Fernando Marías- fue muy interesante, el tema -novela negra sobre corrupción de alto nivel basada en hechos muy reales- me atrae y me provoca y para qué negarlo, el autor tiene un exquisito criterio como jurado. ja ja.
y una magnífica botella de vino que me va a saber -nos va a saber, compartir es vivir- a reserva del 84. la primera de mi cosecha en los Diablos Azules.